Noche [Cleopatra]

Si había algo que estresaba a la joven clon de la reina del Nilo era necesitar algo y no encontrarlo, tal y como le estaba pasando en ese mismo momento. La joven tenia algunas pruebas dentro de unos días y necesitaba su cuaderno de Ingles para estudiar, pero no podía encontrarlo en su habitación aunque abrió, tiro y movió todo en su habitación. Después de debatirse media hora si debía salir de la habitación desobedeciendo la regla de estar dormida a esas horas o quedarse y buscar el cuaderno al día siguiente, decidió salir sigilosamente, deslizándose contra las paredes, alterándose ante el mas mínimo ruido o movimiento.
Se movía por los silenciosos pasillos cuando escuchó una voz a sus espaldas que hizo que se le helara el cuerpo y un escalofrío recorriera su espina dorsal -¿Eres una estudiante? ¿que estas haciendo fuera a estas horas?- Cleopatra se dio media vuelta lentamente, sus piernas apenas le respondían mientras veía a el hombre con el uniforme de guardia aproximarse hacia ella. Finalmente, en un ataque de adrenalina, la joven volvió a darse vuelta y empezó a correr en dirección contraria. El hombre, mucho mas seguro de lo que hacia que ella, empezó a correr tras ella gritándole. El hombre era bastante veterano, por lo que después de perseguirla sin descanso por los pasillos, disminuyó su velocidad abruptamente y se paró en la mitad de pasillo con una mano en el pecho, jadeando agitado, Cleopatra giro en una esquina del pasillo quedando fuera de su rango de visión. Pero enseguida pudo escuchar sus pasos otra vez y cansada y asustada, subió corriendo la escalera que la llevaría a la azotea.
En cuanto llegó, azotó la puerta tras ella y deslizó su espalda por ella hasta quedar sentada en el piso, tomando grandes bocanadas de aire, ignorando que había alguien mas allí.

Volvió otra vez al planeta tierra al escuchar una voz que le preguntaba algo y la nombraba, ella giró su cabeza a todos lados, tratando de ubicar a la persona que le hablaba, encontrado que estaba justo frente a ella. Lo miró de arriba a bajo y lo examinó con la mirada, hasta que finalmente pudor recordar su nombre; era Napoleón Bonaparte, un muchacho de un grado superior, pero no sabia ni cual. Ademas, lo había visto antes en el club de esgrima, era muy bueno y hubiera deseado combatir con el en algún momento. Antes de contestar, dio un suspiro y se paró, sacudiéndose la ropa del polvo del piso -Buscaba algo. Pero un guardia me encontró y corrí hasta aquí....Realmente me asuste- después de decir esto se llevó una mano a la nuca y sonrió -¿Tu eres Bonaparte no? ¿que estabas haciendo tu aquí a estas horas?- preguntó por simpatía sin estar realmente interesada.
En cuanto dijo eso, caminó hacia la barandilla y se apoyó en esta, mirando el cielo nocturno anonadada -Se ve lindo desde aquí...- dijo en voz baja.

Cleopatra movió la cabeza de lado a lado y sonrió -Oh ¿dificultades para dormir, uh? Me pasa seguido también, suelo ocupar el tiempo en hacer tareas si tengo alguna o en leer, entonces me da sueño. Quizá deberías intentarlo- sugirió amablemente -Por mi parte, iba a buscar mi cuaderno de ingles, pero el guardia me alcanzó antes de que pudiera siquiera acercarme, ¿Cuantos de ellos habrá?, la vuelta a los dormitorios va a ser difícil...- La joven suponía que si estaba prohibido salir de el instituto, deberían haber montones de guardias en los pasillos considerando la cantidad de alumnos que había allí. Lo que realmente le preocupaba, era que al toro día la reconociera de alguna forma -aunque en la oscuridad difícilmente la hubiera visto bien- y la metiera en problemas

Bostezó -Supongo que voy a tener que dejar mi cuaderno en donde sea que este hasta mañana. Fue muy impulsivo de mi parte venir a buscarlo a estas horas...- Ahora estaba mas bien pensando en voz alta que hablándole a Napoleon.

Cleopatra le colocó una mano en el hombro de repente -Oh, oye ¿A ti no te vio ninguno?- Preguntó levantando una ceja -Quiero decir, supongo que ya venias hacia aqui a una hora no permitida- aclaró.

Cleopatra asintió al escucharlo hablar sobre sus problemas para dormir, aveces a ella también le había pasado de volver muriendo de cansancio de clases o de las practicas de el club y darse ¨pequeñas siestas¨ de cinco horas que hacían imposible que durmiera de noche, entendía de lo que el le hablaba

Después volvieron a los guardias, ella pensó que quizás de noche hubiera incluso mas, aunque no lo sabia por seguro y prefirió descartar la idea -Espero que verme a mi no los haya alertado...- pensó en voz alta. Quizá el echo de que ella se ¨desapareciera¨ después de la persecución con el guardia haría que todos ellos estuvieran mas atentos a cualquier movimiento o que buscaran cerca de la azotea. Cleopatra movió la cabeza de lado a lado, tratando de espantar esos pensamientos.

-Pero como sea...no quiero pensar mucho en eso ahora- dicho esto volvió su mirada a Napoleaon, quitando su mano del hombro de este -¿Sabes? no creo que quedarte aquí parado te ayude mucho, es decir, ni siquiera estas moviéndote un poco. Si el problema son las siestas gastar energía debería ayudarte a dormir- sugirió levantando su indice -Te e visto un par de veces en el club de esgrima o aveces te e cruzado en el gimnasio ¿no se te ocurrió intentar ocupar tu tiempo por allí?- preguntó.